Paso 2: Dónde está tu NORTE

Dónde está tu NORTE: Segundo Paso del "Fast Pass Way"

Hoy hablamos de “gestionar el error” de manera constructiva, por suerte. ¡Era hora! Pero cuando liderás, ya sea tu negocio, equipo o tu vida, uno de los mayores riesgos ya no es equivocarse… sino avanzar sin tener claro hacia dónde.

Cuanta más incertidumbre y ambigüedad trae el contexto, más claridad y sentido necesitamos definir.

Muchos líderes me cuentan que están llenos de compromisos, alcanzando resultados… pero sienten que algo ya no los representa. Lo sé. Me pasó. No una sino varias veces. Corren, van vienen, y ya no saben hacia dónde ni si quieren seguir haciéndolo. Tienen conversaciones incómodas con sus jefes, difíciles con sus pares y desafiantes con sus equipos. En fin: mucha presión y desgaste, preguntándose cuánto de todo esto vale realmente la pena.

El contexto puede ser confuso, pero la definición de un Norte propio es innegociable. Es lo que te permite optimizar tus recursos, recuperarte mejor después de cada golpe de timón y adaptarte sin perderte en el camino.

Cuando no definís tu Norte como líder de tu propio rumbo, el contexto lo hace por vos: la agenda de tu jefe, las urgencias del mercado, las expectativas de otros. Y eso tiene un costo altísimo: perdés energía, foco y, sobre todo, sentido. No importa si trabajás en una compañía, sos dueño de tu negocio o profesional independiente.

Encontrar tu Norte no significa tener un plan perfecto - sí, lo sé, no es nada fácil. Pero lo buenísimo de sí tenerlo es saber qué sí y qué no vas a hacer, por qué y para qué lo vas a hacer. Dirigir tu tiempo y energía hacia lo que importa de verdad. Esa claridad es la que te sostiene sin asfixiarte en medio de tanta velocidad y ambigüedad.

Este es el segundo paso del método Fast Pass Way: definir un Norte claro y propio. Porque sin Norte definido, todo esfuerzo se convierte en desgaste.

👉 Te invito a reflexionar: ¿Hoy estás corriendo hacia tu Norte… o hacia el de alguien más?

Te leo.